Christopher Ward

Christopher Ward: diseño británico combinado con el arte de la relojería suiza. Mike France, Peter Ellis y Chris Ward fundaron la marca en 2004 en Maidenhead, al oeste de Londres. El objetivo de los tres fundadores era aportar un soplo de aire fresco al a menudo polvoriento mundo de los relojes de lujo. Por ejemplo, Christopher Ward fue una de las primeras marcas relojeras en prescindir de las estructuras de distribución habituales y ofrecer sus relojes exclusivamente a través de su propia tienda en línea. De esta forma, la joven empresa pudo mantener bajos los costes sin tener que renunciar a la calidad.

Christopher Ward colabora desde 2008 con el fabricante de movimientos Synergies Horlogères, con sede en el cantón suizo de Jura. Fruto de esta cooperación son, entre otros, los calibres JJ, movimientos ETA, a los que el maestro relojero Johannes Jahnke dotó de funciones como horas saltantes o función de cronógrafo monopulsador. En 2014, las dos empresas se fusionaron y ese mismo año lanzaron el calibre de manufactura modular SH21.

A diferencia de otras micromarcas, el joven fabricante también apuesta por su propio diseño de cajas, las llamadas Light Catcher Cases, que, al igual que las cajas Oyster de Rolex, varían en forma y tamaño, pero todas se basan en el mismo diseño básico: contornos fluidos con cantos biselados a la perfección y transiciones precisas entre las superficies pulidas y cepilladas hacen que estos relojes parezcan especialmente planos y también juegan maravillosamente con la luz que reciben.

A lo largo de los años, la cartera de productos de Christopher Ward ha crecido hasta alcanzar un número considerable de relojes. Tiene especial éxito la colección de relojes de buceo retro C65, que ofrece modelos clásicos de tres agujas, así como cronógrafos y relojes con un segundo huso horario. Otra serie muy popular es la C60, que contiene relojes de buceo modernos, algunos de los cuales son herméticos hasta 1000 m (100 bar). La colección de relojes deportivos C63, lanzada en 2020, también es muy querida. El catálogo de Christopher Ward también incluye relojes inspirados en relojes militares, así como relojes de vestir como el C1 Moonglow, el C1 Morgan Classic o el C3 Malvern.

En Chrono24 se pueden encontrar relojes de Christopher Ward a partir de unos 290 €. Estos suelen ser relojes antiguos con movimiento de cuarzo de los primeros tiempos de la marca, como el C7 Rapid Chronograph o el C8 Flyer. Los relojes automáticos de esta época se pueden comprar por precios a partir de unos 500 €.

Si prefiere relojes de series más recientes, debe presupuestar entre 700 € para los modelos de tres agujas y 1100 € para los relojes con función GMT. Los modelos superiores con función de hora mundial, indicador de las fases lunares o calibre de manufactura cuestan entre 2000 € y 5000 €, dependiendo del modelo en cuestión.

La colección C65 es una serie de especial éxito en el catálogo de Christopher Ward. Desde su introducción en 2016, los relojes de esta línea han impresionado por su auténtico diseño retro, inspirado en el estilo de los relojes de buceo de los años 50 y 60.

C65 Trident: la exitosa serie de Christopher Ward

Un modelo especialmente popular es el C65 Trident. Este reloj de acero inoxidable de 41 mm es hermético hasta 100 m (10 bar) y cuenta con un estrecho bisel giratorio unidireccional de buceo y un cristal de zafiro abombado. La esfera, disponible en azul o negro, tiene un diseño muy claro y cuenta con índices en forma de puntos y líneas en aplique. Estos, al igual que las agujas bastón, brillan intensamente en la oscuridad.

El corazón de estos relojes es el calibre Sellita SW200-1, que ofrece una reserva de marcha de 38 horas y un indicador de la fecha a las 3. Alternativamente, puede elegir el C65 Trident Handwound, en el que hace tictac el calibre SW210 de cuerda manual. Puede reconocer estos relojes por el hecho de que no tienen fecha y cuentan con una esfera con índices de barras y números grandes a las 6 y las 12.

Puede adquirir el C65 Trident con pulsera de piel, caucho o acero inoxidable. Dependiendo de la versión, los precios oscilan entre los 750 € y 890 €. Christopher Ward también ofreció el C65 Trident en una versión con caja de bronce durante un breve periodo de tiempo. Estos relojes tienen una esfera marrón con una estructura de aspecto orgánico y también están equipados con una versión del SW200 con certificado de cronómetro. El precio del modelo de bronce ronda los 1000 €.

C65 Trident GMT

El C65 Trident también está disponible en una versión con segunda zona horaria. El diseño de la esfera difiere ligeramente del de la versión con tres agujas. Christopher Ward utiliza índices tipo bastón estrechos para mejorar la legibilidad. El bisel también puede girarse a ambos lados y tiene una escala de 24 horas. Este modelo está disponible en distintas variantes: los relojes con esfera blanca tienen un bisel con inserciones de aluminio negro, mientras que los modelos con esfera negra o azul tienen un bisel "Pepsi" azul y rojo o un bisel de acero inoxidable cepillado.

Sin embargo, la característica más llamativa del C65 Trident GMT es la aguja GMT adicional. Esta tiene una ancha punta de flecha y está acabada en rojo o naranja, dependiendo de la variante. Los modelos con manecilla naranja, en particular, no pueden ocultar un cierto parecido con el Rolex Explorer II. A diferencia del reloj de la marca de la corona, no obstante, el C65 Trident GMT es una absoluta ganga, con precios que oscilan entre los 800 € y los 1200 €.

C65 Super Compressor: dos coronas y anillo giratorio interior

Christopher Ward añadió en 2020 un nuevo miembro a la familia C65: el C65 Super Compressor. Para este reloj, los relojeros de Christopher Ward utilizaron el principio de funcionamiento del Super Compressor original, desarrollado por Ervin Piquerez SA (EPSA) a principios de los años 60. La caja está diseñada de tal manera que la presión del agua la comprime cada vez más. De este modo, el reloj se sella a sí mismo, por así decirlo. Gracias a las modernas técnicas de fabricación, Christopher Ward ha conseguido equipar por primera vez un Super Compressor de este tipo con un fondo de caja transparente. Este es de cristal de zafiro y revela el Sellita SW200-1.

La caja Light Catcher se ha adaptado ligeramente para el C65 Super Compressor y ahora tiene una silueta en forma de cojín. Christopher Ward también equipa los relojes con dos coronas, al igual que el original de los años 60. La corona situada a las 4 se utiliza para ajustar la hora y dar cuerda manualmente al reloj. La corona situada a las 2 se emplea para ajustar el bisel giratorio interno con escala de buceo. Este reloj presenta un cristal de zafiro abombado.

Para comprar un C65 Super Compressor con correa de piel o caucho deberá disponer de unos 1050 €. Las versiones con brazalete de acero inoxidable cuestan unos 1200 €.

C65 Aquitaine: inspirado en el Blancpain Fifty Fathoms

El C65 Aquitaine forma parte de la colección desde 2022. A diferencia del C65 Trident, cuyo diseño se inspira en las primeras versiones del Rolex Submariner o del Omega Seamaster 300, el C65 Aquitaine se inspira en otro clásico: el Fifty Fathoms de Blancpain. Esto es especialmente visible en el bisel del reloj de buceo, que tiene una incrustación de cristal de zafiro abombado en azul o verde. La escala del bisel también es luminiscente, lo que facilita leerla incluso en la oscuridad. Lo mismo ocurre con los índices en aplique y las agujas del reloj.

En cuanto a las esferas, puede elegir entre una esfera mate de color crema o negro y variantes con un acabado de rayos de sol azules o verdes. Las correas de piel de colores a juego, las correas de caucho azules o negras y los brazaletes de acero inoxidable de tres filas garantizan un buen ajuste a la muñeca.

Dependiendo de la variante de brazalete que elija, deberá tener preparados entre 1150 € y 1340 € para un C65 Aquitaine de tres agujas. Sin embargo, también puede decantarse por el C65 Aquitaine GMT con una segunda zona horaria, cuyos precios oscilan entre los 1465 € y 1640 €.

El C65 como cronógrafo

El C65 Chronograph tiene la misma estética que el C65 Trident, pero a diferencia de su modelo hermano con tres agujas, este cronógrafo es considerablemente más grueso. Incluyendo el cristal de zafiro abombado, el cronógrafo mide la friolera de 15 mm de grosor, 3 mm más que el Trident. Sin embargo, gracias a la caja Light Catcher, el reloj parece poseer unas proporciones perfectas.

El responsable del grosor del reloj es el calibre Sellita SW-510 BHa, que proporciona al reloj un contador de 30 minutos a las 3 horas, una fecha a las 6 y un pequeño segundero en la posición de las 9. Los pulsadores y la corona están atornillados, por lo que el reloj es hermético hasta 150 m (15 bar).

La esfera presenta un acabado azul oscuro con efecto rayos de sol. El borde exterior está decorado en blanco y alberga una escala taquimétrica. Los índices de barras en aplique con material luminiscente marcan las horas. Las subesferas son blancas en contraste con el fondo y presentan una estructura radial. Christopher Ward divide los 10 primeros minutos del contador de 30 minutos en una sección roja y otra azul, como también era habitual en los cronómetros de regata de la década de 1960.

Los precios de los C65 Chronograph oscilan —dependiendo de la pulsera elegida (cuero, caucho, acero inoxidable)— entre los 1690 € y 1850 €.

El C65 en estilo militar

La colección C65 incluye varios modelos inspirados en relojes militares. El C65 Dartmouth, por ejemplo, se diseñó en colaboración con el Ministerio de Defensa británico y toma como referencia relojes que estuvieron en servicio en la Royal Navy en la década de 1960.

El C65 Sandhurst, por su parte, se inspira en el legendario reloj de campo Smiths W10, que formaba parte del equipamiento del ejército británico a finales de la década de 1960.

El C65 Cranwell completa la ronda. Este reloj tiene el aspecto de los relojes de aviador que llevaban los pilotos de la Royal Air Force en los años 50 y 60.

En los tres relojes, late un Sellita SW200 con calidad de cronómetro. Los movimientos están certificados por el Contrôle officiel suisse des chronomètres (COSC) y se desvían de la hora estándar un máximo de -4/+6 segundos al día.

Este reloj militar retro cuesta entre 1140 € y 1290 €.

La colección C60 es la contraparte moderna de la serie C65. El C60 es un reloj de buceo que es cualquier cosa menos retro, con características contemporáneas como un bisel de cerámica, mayor resistencia al agua de al menos 300 m (30 bar) y cajas Light Catcher rediseñadas, que ahora tienen protección de corona y están disponibles en tamaños de 38 mm, 40 mm y 42 mm.

Las estrellas de la colección son los modelos con el calibre de manufactura SH21, entre los que se incluyen el C60 Abyss SH21 y el C60 Concept. El primero tiene una caja de acero inoxidable con superficies recubiertas de Gunmetal PVD (Physical Vapour Deposition) gris oscuro y DLC (Diamond-like Carbon) negro. El bisel es de cerámica negra mate con números y marcadores también en Super-LumiNova de color negro. Los cristales de zafiro ennegrecidos de la parte delantera y trasera del reloj completan el diseño oscuro de este reloj. La esfera está totalmente esqueletizada y permite echar un vistazo en profundidad al interior del calibre. El precio de los Christopher Ward C60 Abyss SH21 oscila entre los 2600 € y los 2800 €, dependiendo de la pulsera que se elija.

El C60 Concept es el buque insignia de Christopher Ward. Este reloj está limitado a 210 ejemplares y tiene una serie de características especiales. La marca fabrica la caja Light Catcher de este reloj en titanio y el movimiento SH21, elaboradamente esqueletizado está decorado en abundancia. La empresa suiza Chronode, que también trabaja para marcas como MB&F o Czapek, es la responsable de ello. Otro elemento destacado es el triángulo naranja situado a las 12 horas, que consiste en una mezcla especial de cerámica llamada Globolight XP, que es luminiscente. En combinación con la Super-LumiNova azul claro de las agujas, los índices y el bisel de cerámica, el resultado es un impresionante juego de colores en la oscuridad. Por esta rara pieza de coleccionista con correa de caucho, deberá invertir unos 5300 €. Para las versiones con brazalete de acero inoxidable, el precio sube rápidamente hasta los 8000 € o más.

Christopher Ward C60 Pro y Elite: sumergibles hasta 1000 m

Si busca un reloj que también le sirva para inmersiones prolongadas, entonces debería echar un vistazo más de cerca al C60 Trident Pro 600 o al C60 Elite 1000. Ambos hablan el mismo lenguaje de diseño y solo se diferencian a primera vista en que el Elite 1000 tiene un indicador Day Date, mientras que el Pro 600 "solo" muestra la fecha junto con la hora.

La mayor diferencia entre los dos relojes es su resistencia al agua. El C60 Trident Pro 600 es sumergible hasta una profundidad de 600 m (60 bar), mientras que el Elite 1000 es —como su nombre indica— sumergible hasta 1000 m (100 bar), lo que sitúa a los relojes en la misma liga que el Omega Seamaster Planet Ocean 600M o el Sinn U1 en términos de resistencia al agua.

El C60 Elite 1000 de 42 mm está disponible con esfera negra y bisel cerámico negro o con esfera azul y bisel cerámico azul. También puede elegir entre brazaletes de acero inoxidable, correas de caucho o #tide fabricadas con plástico reciclado recuperado de los océanos del mundo. Dependiendo de la versión, un C60 Elite 1000 cuesta entre 1200 € y 1600 €.

El C60 Trident Pro 600 puede elegirse con caja de 38 mm, 40 mm o 42 mm, de color negro o azul o como versiones con esfera blanca y bisel negro. Los precios de los relojes de tres agujas comienzan en unos 500 € para las versiones más antiguas —reconocibles por la aguja horaria en forma de pera— y suben hasta unos 800 € para los modelos actuales con brazalete de acero inoxidable. Puede adquirir ejemplares con función GMT o caja de bronce a partir de unos 900 €.

Otras variantes del C60

Otras variantes del C60 son el C60 Chronograph y el C60 Sapphire. El Chronograph tiene una disposición bicompax con un contador de 30 minutos a las 3, una fecha a las 6 y un segundero pequeño a las 9. Los pulsadores y la corona están atornillados, lo que hace que este reloj de acero inoxidable de 42 mm sea hermético a 600 m (60 bar). La esfera y el bisel de cerámica son negros y contrastan muy bien con las agujas y los índices luminiscentes blancos. Christopher Ward aporta un poco de color al reloj diseñando las agujas de la función de cronógrafo en amarillo.

El C60 Chronograph cuesta unos 1000 €.

El C60 Sapphire es básicamente una versión especial del C60 Trident Pro 600 con un diámetro de 40 mm. La selección de caja, calibre y brazalete corresponde exactamente a la de la versión estándar. La diferencia radica en la esfera utilizada, que en el C60 Sapphire es de cristal de zafiro coloreado. Además, Christopher Ward fabrica el bisel en acero inoxidable cepillado.

Puede adquirir el C60 Sapphire con esfera de zafiro azul, roja o ennegrecido por unos 1000 €.

La colección C63 Sealander es la última incorporación al catálogo de Christopher Ward. Estos relojes son deportivos de diseño moderno y poseen un tamaño moderado de 39 mm. La colección se divide en los modelos de tres agujas Sealander Automatic y Sealander Bronze COSC, así como el Sealander GMT equipado con una segunda zona horaria. Este último es fácilmente reconocible por su bisel de 24 horas y su aguja GMT naranja en forma de flecha.

En las versiones de tres agujas, Christopher Ward utiliza el calibre Sellita SW200-1, certificado como cronómetro por el COSC en los modelos de bronce, mientras que el corazón de los relojes GMT es el Sellita SW330-2 GMT.

Christopher Ward ofrece el C63 Sealander en distintas variantes de color, por lo que puede elegir entre esferas blancas, negras, azules o verdes. La esfera de la variante de bronce está hecha de zafiro ennegrecido, lo que le da un toque especial.

Los precios de los Sealander rondan los 750 € para los modelos de tres agujas y algo menos de 1000 € para los ejemplares con función GMT. Para comprar el Sealander de bronce, deberá presupuestar unos 1200 €.

Especialmente resistente: el C63 Elite

El C63 Elite está diseñado para todo tipo de actividades al aire libre. Su característica más destacada es la corona retráctil. Se hunde en la caja y solo sale cuando se desea dar cuerda o ajustar el reloj. También llaman la atención las estrechas aberturas de la esfera que separan el centro de la indicación horaria del réhaut y que permiten ver a través del reloj. Para ahorrar el máximo peso posible, Christopher Ward fabrica el reloj de 40 mm en titanio. En su interior late un calibre Sellita SW200-1 con certificado de cronómetro.

Puede comprar un C63 Elite con correa de caucho desde unos 1300 €. Si prefiere un brazalete de titanio de tres filas, el precio asciende a unos 1650 €.

Además de la amplia gama de relojes deportivos y relojes herramienta, Christopher Ward también ofrece una serie de interesantes relojes de vestir. Un ejemplo particularmente impresionante es el C1 Moonglow. Este reloj de acero inoxidable de 40.5 mm cuenta con un indicador de la fase lunar que solo hay que corregir cada 128 años gracias al calibre JJ-04 basado en el Sellita SW220.

El indicador de la fase lunar es un regalo para la vista. El disco lunar con las dos lunas tridimensionales fotorrealistas ocupa todo el centro de la esfera. La parte superior está recortada para que la luna pueda verse allí en todo su esplendor. La parte inferior, en cambio, es de cristal de zafiro ennegrecido. Pero las lunas no solo tienen un aspecto realista, sino que también están provistas de material luminiscente, por lo que el nombre "Moonglow" (brillo lunar) no es casual.

El C1 Moonglow se vende por unos 2300 €.

El C9 Harrison Jumping Hour es otro interesante ejemplo de reloj de vestir de Christopher Ward. Este reloj utiliza el calibre JJ01. Este está basado en el ETA 2428-2 y tiene horas saltantes. Estas no se muestran como de costumbre con una aguja, sino como dígitos en una ventana a las 12. La indicación salta con precisión cada hora completa, de ahí el nombre. Los minutos se leen como de costumbre a través de una aguja central.

Puede conseguir un C9 Harrison Jumping Hour a partir de unos 1500 €.

Si prefiere algo un poco más tradicional, puede optar por el C5 Malvern Mk III. Este reloj es el primero que lanzó Christopher Ward. Tiene una esfera escalonada con el centro ligeramente más bajo que el anillo con los índices bastón en aplique. Otras características de este reloj son las agujas finas y la indicación de la fecha.

Puede adquirir este reloj de pulsera clásico, disponible con esfera blanca, negra y azul, por cifras que oscilan entre los 500 € y 650 €, según la versión.