La válvula de escape de helio: algunos relojes de buceo cuentan con ella, otros no. El modelo más famoso con este elemento es el Rolex Sea-Dweller. Pero ¿para qué hace falta esta válvula a la hora de bucear?
¿Cómo funciona una válvula de helio?
La válvula de helio protege al reloj de posibles daños. Se trata de una válvula de seguridad que deja salir moléculas de helio en el buceo de saturación y durante la fase de descompresión. Cuando se bucea a altas profundidades por cuestiones profesionales, los buzos pasan por una cámara hiperbárica y respiran una mezcla de gases compuesta por helio y oxígeno denominada Heliox. El helio sustituye al nitrógeno que se encuentra en el aire de forma natural y que puede provocar narcosis cuando hay una presión excesiva. Pero las moléculas de helio son tan pequeñas que pueden penetrar en el interior de la caja de los relojes de buceo a través de las juntas. Durante la descompresión, el helio no se escapa con la suficiente velocidad, y la presión puede provocar que el cristal salte o se suelte. Este es el motivo por el que algunos relojes de buceo, como el Rolex Sea-Dweller, cuentan con una válvula de escape de helio. No obstante, en los relojes para el submarinismo deportivo, esta válvula es prácticamente innecesaria.
La historia de la válvula de escape
En los inicios del buceo de saturación, los buzos profesionales solían quejarse de que el cristal del reloj saltaba durante la descompresión. Así que, en la década de 1960, Rolex colaboró con la empresa de buceo francesa Comexpara desarrollar una válvula de helio. Al principio, la manufactura relojera de Ginebra enviaba a Comex relojes diver que se habían reequipado. A día de hoy, estos modelos de Rolex Comex son muy escasos y codiciados, y, por consiguiente, caros.
Por fin, en 1967 salió al mercado el Sea-Dweller, que tiene una válvula de helio integrada en el lado izquierdo de la caja. Esta es una de las características más importantes del Sea-Dweller, junto con la ausencia de la lente de aumeto para la fecha y una mejor hermeticidad, de 610 m. El primer modelo de este reloj de buceo para profesionales lleva la referencia 1665. También se le conoce con el apelativo «Double Red» porque tiene escrito «SEA-DWELLER SUBMARINER 2000» en dos líneas con letras rojas. Por supuesto, estos primeros relojes son muy admirados y gozan de precios muy elevados.
Relojes de buceo famosos con una válvula de helio: el Rolex Sea-Dweller
Como ya hemos mencionado, el Rolex Sea-Dweller es el primer reloj de buceo con una válvula de helio, y también el más conocido. El modelo actual, con el número de referencia 126600, se lanzó al mercado en 2017 para celebrar el 50º aniversario de este reloj. A diferencia de su predecesor, ya no tiene 40 mm de diámetro, sino 43 mm. La caja sigue siendo hermética hasta los 1220 m (120 bar). En este modelo se incorpora por primera vez la lente Cyclops para ampliar el indicador de la fecha, lo que es motivo de gran controversia entre los seguidores de Rolex.
El calibre de manufactura 3235 también es nuevo y está provisto del escape Chronergy, patentado y particularmente eficiente. Gracias a su nuevo mecanismo, la reserva de marcha ahora alcanza unas 70 horas. Y, por supuesto, este Sea-Dweller está certificado como «Cronómetro Superlativo», por lo que solo se desvía entre -2 y +2 segundos al día.
Omega Seamaster Planet Ocean 600 M
El Omega Seamaster Planet Ocean 600 M es el reloj de buceo profesional de Omega. Existen numerosos modelos diferentes: desde la versión de tres agujas, pasando por la versión GMT, hasta los cronógrafos, Omega tiene de todo en su repertorio. El que mejor se puede comparar con el Sea-Dweller de Rolex es la variante de tres agujas con indicador de la fecha a las 3 en punto. Con un diámetro de 43,5 mm, tiene casi las mismas dimensiones, aunque solo es hermético hasta los 600 m (60 bar). La válvula de helio del reloj de Omega también se ubica en el lado izquierdo de la caja, pero a las 10 en punto en vez de a las 9. Además, funciona de un modo diferente: mientras que la válvula de escape de helio del Rolex es automática, la del Omega Seamaster Planet Ocean 600 M se debe girar durante la fase de descompresión.
Este reloj de pulsera está certificado como «Master Chronometer», por lo que no solo es enormemente preciso, sino que también es antimagnético hasta los 15.000 gauss.
Tudor Pelagos – Cronómetro de titanio con válvula de helio
El Tudor Pelagos es otro reloj de buceo con válvula de helio. Al igual que en el Rolex Sea-Dweller, esta válvula de seguridad automática se encuentra integrada en el lateral izquierdo de la caja, a las 9 en punto. La excepción es el Pelagos LHD (abreviatura de Left Hand Drive, dirección a la izquierda), en el que la corona se ubica al lado izquierdo. Este modelo está concebido para aquellos que llevan el reloj en la muñeca derecha. En el Pelagos LHD, la válvula de escape se sitúa en el lado derecho, a las 3.
En todos los Pelagos de Tudor, filial de Rolex, la caja está compuesta de titanio. Este material es mucho más ligero que el acero inoxidable, pero tan duro y resistente a la corrosión como este. La caja del reloj está totalmente satinada y tiene un diámetro de 42 mm. El bisel giratorio del Pelagos también está fabricado en titanio y cuenta con un revestimiento de cerámica especialmente resistente a los arañazos. La esfera y el bisel se pueden obtener en negro o en azul. Este reloj es hermético por completo hasta los 500 m (50 bar).
Otro aspecto destacado del Tudor Pelagos es su brazalete de titanio. El cierre desplegable de seguridad ostenta un mecanismo de autoajuste patentado que se adapta automáticamente a la presión ambiental. A medida que sube la presión al aumentar la profundidad, el brazalete se contrae de forma automática. Cuando la presión disminuye al volver a la superficie, se vuelve a expandir. De esta manera se adapta a las dimensiones del traje de buceo en la muñeca.
El calibre de manufactura automático MT5612 tiene certificado de cronómetro, presenta un indicador de la fecha a las 3 en punto y ofrece una reserva de marcha de 70 horas.
El cronógrafo Oris Prodiver
Además de una válvula de helio, el Oris Prodiver Chronograph incluye una función de cronógrafo con la que se pueden medir periodos de tiempo de hasta 12 horas. En el interior de este reloj de buceo de 51 mm se aloja el calibre Oris 774, que está basado en el SW 500 de Sellita y consta de una reserva de marcha de unas 48 horas.
La parte exterior del bisel de cerámica está engomada, de manera que resulta más fácil de agarrar. La corona y el pulsador están atornillados para que no entre agua en el interior de la caja. Este cronógrafo es resistente al agua hasta los 1.000 m (100 bar) y alberga una válvula de helio automática en el lado izquierdo de la caja, a las 9 en punto.
Seguir leyendo
Relojes de buceo: de los relojes deportivos a los iconos certificados
Una breve historia del Blancpain Fifty Fathoms – El reloj de buceo original