NOMOS Tetra

El Nomos Tetra une la firme elegancia de su caja cuadrada con los tonos alegres de la esfera. Tetra, la palabra griega para el número cuatro, alude a su forma geométrica. Aunque el reloj se sale de la norma con este diseño, sigue conservando la identidad típica de un Nomos: líneas rectas y un aspecto sobrio y refinado. Puesto que no posee una caja redonda, pertenece a los denominados "relojes de forma".

Los ejemplares de la manufactura sajona Nomos son, en su mayoría, unisex, por lo que sirven tanto para damas como para caballeros. Existen variantes de los siguientes tamaños: 33 mm x 33 mm, 29,5 mm x 29,5 mm y 27,5 mm x 27,5 mm. La versión de 29,5 mm x 29,5 mm saltará a la vista en una muñeca fina, mientras que, en una más gruesa, tendrá un aspecto más bien formal. El modelo más pequeño, con una caja de 27,5 mm x 27,5 mm, está orientado ante todo al público femenino. Todas las variantes son sorprendentemente planas; solo miden unos 6 o 7 mm de altura. En el interior de estos relojes de Glashütte late el calibre de cuerda manual Alpha, que ya desde el año 1992 se aloja en el modelo más vendido de la marca: el Tangente. Pero la línea Tetra también ofrece relojes automáticos: el calibre extraplano DUW 3001, de la serie Neomatik, desempeña asimismo su labor en esta colección.

La esfera se oferta en diferentes colores, como granadina, verde menta, diversas tonalidades azules e incluso el clásico blanco. Sin embargo, todas las cajas de los modelos Tetra son de acero inoxidable. Para la correa se puede escoger entre cuero cordobán negro liso o ante de distintos tonos, como el gris o el marrón. Algunos modelos también se pueden adquirir con un fondo de cristal de zafiro, lo que permite admirar el movimiento.

El Tetra se lleva produciendo desde 2007, por lo que existen unos cuantos ejemplares a buen precio en el mercado de segunda mano. Los modelos clásicos con esfera blanca y en buen estado se pueden adquirir por apenas 1000 €. La mayoría de los modelos de esta categoría de precios miden 27,5 mm x 27,5 mm y llevan una correa de cuero negro cordobán. Las agujas pueden ser negras o azuladas; estas últimas crean un bonito contraste con la esfera blanca. En su interior todavía suele latir el antiguo calibre de cuerda manual Nomos 1 TS, que se desarrolló a partir del Peseux 7001 de ETA. Los modelos sin estrenar en este mismo estilo, como los de la colección Tetra 27, cuestan unos 1300 €.

Si lo que está buscando es un reloj automático, tendrá que dirigirse a la serie Tetra Neomatik. Estos modelos miden 33 mm x 33 mm, con lo que, en comparación, resultan mucho más masculinos. Además, la manecilla roja del pequeño segundero les concede un toque deportivo. El Tetra Neomatik azul noche debe su nombre a la tonalidad azul oscura de su esfera. Un modelo nuevo ronda los 2500 €. El Tetra Neomatik Silvercut, con su esfera plateada, presenta un aspecto mucho más futurista, pero a nivel de precio se sitúa a una altura similar.

Dentro de esta colección destaca la línea especial Tetra Berlín, cuyas esferas de colores alegres otorgan a estos relojes un cierto toque chic berlinés. Sus nombres hacen referencia a elementos famosos de la ciudad. El Tetra Clärchen recibe su apodo de la sala de baile homónima situada en el corazón de Berlín, en la que se lleva más de 100 años moviendo el esqueleto. La esfera de este reloj es verde como una mesa de billar, y las manecillas están chapadas en oro. Como en los demás modelos de la línea Tetra Berlín, la correa es de ante gris. Los ejemplares nuevos cuestan unos 1600 €.

El Tetra Goldelse está inspirado en la estatua dorada de la Columna de la Victoria de Berlín, y, con su esfera de oro rosa, es el más elegante de la serie. Le sigue el Tetra Nachtijall, con esfera azul oscuro y manecillas doradas. Ambos modelos tienen un precio similar al Clärchen.

El Tetra Kleene no es tan pequeño como su nombre alemán parece indicar. Al igual que sus hermanos, dispone de una caja de 29 mm de lado, pero en su interior se aloja el calibre DUW 4301 con indicador de la reserva de marcha. La esfera es de color turquesa, y las agujas doradas contrastan elegantemente con la caja de acero inoxidable. Un Kleene nuevo cuesta unos 2000 €.

La serie especial Petit Four reviste las esferas del Tetra en cuatro delicados tonos pastel: rojo granadina, rosa (Perla), verde matcha y azul cielo. Estas variantes son especialmente desenfadadas, pues las manecillas y los índices también son de distintos colores. En todos ellos late el calibre Alpha. Un Tetra Matcha o Azur nuevo se puede adquirir por cerca de 1500 €, mientras que el Granadina y el Perla en este mismo estado valen unos 200 € más.

Muchos modelos de la serie Tetra albergan el prestigioso calibre Alpha de fabricación propia. Este mecanismo dispone de una reserva de marcha de 43 horas y mide 23,3 mm de ancho y 2,6 mm de alto. Cuenta con un pequeño segundero posicionado a las seis, un mecanismo de parada de segundero y la platina de tres cuartos característica de los relojes de Glashütte. También incorpora una rueda de corona y trinquete de Glashütte, tornillos de acero azul templado, el sistema antichoque Incabloc y 17 rubíes. El mayor desafío al que se enfrentaron los artesanos de Nomos fue, no obstante, construir un mecanismo redondo resistente al agua dentro de una caja cuadrada. Y lo consiguieron: el Tetra es hermético hasta los 3 bares de presión.

En esta serie se emplean cada vez más movimientos automáticos, como el DUW 3001. Este calibre causó una gran sensación cuando se lanzó en 2015 por su construcción extraplana y precio relativamente moderado. El DUW 3001 mide tan solo 3,2 mm de altura, lo que lo hace ideal para la fina caja del Tetra. La denominación Neomatik nos revela qué modelos contienen este calibre.