TAG Heuer Monza

El autriaco Niki Lauda, leyenda de Fórmula 1, se convirtió en campeón mundial de Fórmula 1 en 1975 por primera vez. Para conmemorar este suceso, la empresa Heuer, que firma sus creaciones como TAG Heuer desde su anexión a Tecniques d'Avant Garde (TAG), lanzó el Monza. Este modelo, considerado el hermano pequeño del Carrera, destaca sobre todo por su caja recubierta de PVD de color negro. Estos relojes alcanzaron rápidamente la popularidad y, hoy en día, son verdaderas piezas de coleccionista.

A inicios de los años 2000, el Monza celebró su regreso con un nuevo diseño de la caja y un calibre nuevo. En esta reedición, TAG Heuer utilizó, entre otros, el Calibre 36, que se basa en el El Primero, el famoso calibre de Zenith. Asimismo, la casa suiza ofrecía también este modelo en una variante de tres agujas y caja de oro.

Desde 2015, el Monza forma parte de la colección Heritage. Este modelo tiene una caja de acero inoxidable recubierta de una capa negra con la forma de los modelos Re-Edition y el diseño en negro de la esfera de los Monza más antiguos, incluyendo el segundero de la función de cronógrafo en rojo y la escala taquimétrica y de pulsómetro en el réhaut. En su interior late el famoso Calibre 17 basado en el ETA 2894-2.

El Monza de los años 60 y 70 ha sido hasta hoy una alternativa económica al Carrera. La caja del Monza tiene la misma forma oval que el Carrera; no obstante, está elaborada en latón en vez de acero inoxidable. Asimismo, dependiendo de la versión, la caja está revestida en una capa negra de PVD o de cromo.

Los primeros modelos albergan el Calibre de manufactura 15 en su interior. Este movimiento es una versión más simple del Calibre 11 y 12 desarrollado por Heuer, Breitling, Büren y Dubois Dépraz. El pequeño segundero se ubica en él a las 10 horas, la fecha a las 6, y el contador de los minutos a las 3 horas. Como en todos los calibres de esta familia, la corona se encuentra en la parte izquierda de la caja.

Poco después, Heuer presentó una versión del Monza con el Calibre 12. Los relojes con este calibre se diferencian de los modelos con Calibre 15 en que no poseen un pequeño segundero. En cambio, el Calibre 12 luce un segundo contador de horas para la función de cronógrafo en la posición de las 9 horas.

Los ejemplares vintage del Monza son extremadamente populares entre los coleccionistas. El modelo con Calibre 15 es sobre todo muy codiciado y alcanza precios de hasta 4700 €. Las otras alternativas son algo más baratas: su precio ronda los 3300 €.

Después de desaparecer del catálogo de TAG Heuer por casi 20 años, la marca suiza sacó al mercado los llamados modelos Re-Edition en 2005. Estos se diferencian notablemente de su predecesores ya que los diseñadores construyeron la caja con forma de cojín, inspirándose en un cronógrafo monopusher de Heuer de la década de 1930.

La esfera también fue rediseñada por completo. Ahora luce índices rodiados en aplique y un gran 12 también en aplique. Asimismo, las agujas tienen forma de espada, y la escala taquimétrica se ha transformado en una minutería detallada. Las subesferas también han cambiado: mientras que el totalizador a las 6 horas es redondo, los indicadores en la posición de las 3 y 9 horas copian la forma de la caja.

TAG Heuer ofrecía este cronógrafo en una versión con Calibre 17 basado en el ETA 2894-2 y en otro con el Calibre 36 (Zenith El Primero). Puede diferenciar ambas versiones porque la que alberga el Calibre 17 muestra la fecha a las 4:30 horas y la versión con Calibre 36 la muestra a las 6 horas. En 2011 se presentó otra versión con el Calibre 36. La esfera y las agujas de esta versión se parecen a aquellas de los relojes de los años 30.

Tanto los relojes con Calibre 17, como los que albergan el Calibre 36, pueden encontrarse con caja de acero inoxidable por precios que van de los 3000 € a los 3600 €. No obstante, también existen modelos con caja de oro rosa de 18 quilates. En buen estado, un ejemplar de oro rosa con Calibre 17 cuesta alrededor de 4800 € y, para el mismo modelo pero con el Calibre 36, alrededor de 7300 €.

Con la serie Re-Edition, TAG Heuer presentó el Monza por primera vez como reloj de tres agujas . Su diseño se corresponde al de la versión con cronógrafo, aunque tiene una apariencia más ordenada. El pequeño segundero a las 6 horas le aporta un toque elegante. TAG Heuer equipa a este reloj con el Calibre 6, basado en un ETA 2895-1 modificado.

En buen estado, puede encontrar ejemplares en acero inoxidable por unos 1400 €. La versión con caja de oro y esfera estructurada es bastante inusual, por lo que su precio supera fácilmente los 6000 € en buen estado.

Para alegría de muchos apasionados de la marca, TAG Heuer presentó el modelo Heritage Monza Calibre 17 en 2016. El fabricante suizo combina en este modelo todo lo que ha hecho tan popular al Monza en sus 40 años de historia.

Así pues, se volvió al diseño de la esfera de los modelos de las décadas de 1970 y 1980: esfera de color blanco, con agujas luminiscentes e índices (incluida una escala taquimétrica y de pulsómetro en el réhaut) sobre un fondo negro mate, segundero de la función de cronógrafo rojo y toques en rojo en las subesferas y el réhaut. En cambio, la forma de la caja se inspira en la de los modelos Re-Edition de principios de los 2000. A diferencia de estos ejemplares, la caja de los modelos Heritage están elaboradas en titanio con revestimiento negro de PVD , exactamente como la versión original de los años 70.

En su interior late el Calibre 17, basado en el ETA 2894-2. Este movimiento dota al reloj de un pequeño segundero a las 3 horas, de un indicador de la fecha a las 6 horas y de un contador de minutos a la altura de las 9 horas. Los pulsadores, así como la corona, se encuentran a la parte derecha de la caja fabricada en titanio de 42 mm.

Para comprar un ejemplar sin estrenar de estos relojes, deberá calcular un presupuesto de aproximadamente 3600 €. Los modelos de segunda mano en buenas condiciones son algo más baratos ya que su precio ronda los 3000 €.